Valencia, 2 dic (EFE).- El sector promotor valenciano prevé que el mercado inmobiliario crezca en casi todos los segmentos en mayor o menor intensidad, y destaca la venta frente al alquiler, la obra nueva y las zonas de la costa de Alicante y Valencia ciudad.
El sector se encuentra en un proceso de maduración y desde principios de año, aunque todavía con niveles mínimos, se está incrementando la petición de licencias, han señalado en un comunicado.
La demanda efectiva en el número de transacciones en los últimos años ha tenido un repunte en la segunda mano y en Alicante, cuyos niveles están similares a los años 2007/2008, cuando el mercado de segunda mano era más pequeño y ocupaba algo menos del 50 % de la cuota de mercado.
Sin embargo la actividad presenta «notables desigualdades» según la zona, ha apuntado José Manuel Luis.
Castellón es la que menos transacciones presenta y Alicante la de mayor número, mientras que Valencia, cuyo peso en segunda residencia es menor que en Alicante, la mayor parte del mercado espera que haya un repunte de actividad en obra nueva, fundamentalmente en la capital, tanto en venta como en alquiler.
José Luis Miguel ha comentado que en el sector existe una competencia por parte de los nuevos fondos de inversión que han entrado en la actividad y las cooperativas que, según ha dicho, «en ocasiones pueden estar distorsionando los precios y las dificultades de financiación».
Según Miguel, «lo que debemos hacer los promotores es aprovechar aquellos nichos que van dejando esos nuevos operadores, como el extrarradio de las ciudades con actividad industrial y la rehabilitación de las viviendas de los centros históricos».
Por su parte, el autor del estudio ha señalado que la mayor parte del sector indica que la crisis y las dificultades de financiación «han eliminado muchos agentes oportunistas y especuladores y en la actualidad, el sector cuenta con un mayor grado de profesionalización».
A ello se añade el atractivo turístico e inversor que tienen la Comunitat Valenciana.