En contra de las predicciones y de la opinión general, los precios han subido en Valencia un 2,6 % con respecto a marzo de este mismo año, junto antes del confinamiento.
Esto es debido a que sigue existiendo una demanda de vivienda superior a la oferta. Aunque desde 2016 se está volviendo a construir obra nueva, de momento no es suficiente para cubrir toda la demanda. También es escasa la oferta existente de vivienda usada.
A este escenario hay que añadirle un precio bajo del dinero, que todavía hace mas atractiva la inversión en ladrillo, y un abaratamiento gradual de las hipotecas.
No hay pues ningún motivo para pensar que los precios pueden bajar a corto o medio plazo en la ciudad de Valencia, sino que es previsible un aumento de precios en torno al 6% anual durante los dos próximos años.
Evolución del precio de la vivienda en venta en València
Es posible que volvamos, como en la crisis anterior, a una España a diferentes velocidades. Igual que sucedió entre 2008 y 2014, la España que se llena, en la que se concentra la demanda, sostenida principalmente por inversores y que es generadora de empleo (Madrid, Barcelona, Málaga, Valencia, la costa mediterránea y los archipiélagos) podría no experimentar las caídas de precio tan relevantes que sí afectarán a la España que se vacía, llegando a tener una recuperación más rápida que en la crisis anterior.
«Idealista»
El precio de la vivienda usada baja un 6,1% entre abril y junio en España